P. Nazario Pascual Merino Bajo

Padre Nazario Pascual Merino Bajo nació el 12 de junio de 1929 y tenía 92 años. Hizo sus primeros votos el 29 de septiembre de 1947 y fue ordenado sacerdote el 17 de abril de 1954.

Actualmente vivía en Madrid (España). Pertenecía a la Provincia ESP.

A tus manos encomiendo mi espíritu. (Sl 31,6)

Queridos hermanos religiosos:

Figuraba en el primer puesto de nuestro Elenchus provincial. Uno de esos que llamamos bajones coincidió con la irrupción de la pandemia de Covid-19. Tras los esmerados cuidados recibidos en su comunidad, logró recuperarse parcialmente; a las ya antiguas dificultades para oír, se sumaron la progresiva incapacidad para poder hablar y comunicarse. De vez en cuando, había días más revueltos y el del pasado martes 22 de marzo fue especialmente preocupante, lo que hizo que la comunidad, apoyada por una de sus sobrinas, llamase a una ambulancia para trasladarlo al hospital en el que yo mismo estaba entonces ingresado. Cuando pude regresar a casa, me pasé por su habitación donde dormía, si bien con esa respiración que habla de combate. Pero tampoco sospeché que iba a ser la última vez que nos viésemos.

Recio leonés de Gordaliza del Pino, sus días comenzaron un 12 de junio de 1929, festividad del santo leonés Juan de Sahagún, en el seno de la familia que formaron Félix y Dolores, quienes tuvieron a sus hijos Dolores y Lázaro, Félix y Florentina, así como a nuestro Nazario. Con 92 años, ha cerrado los ojos a este mundo en el Hospital universitario San Francisco de Asís a las 17.00 del sábado 26 de marzo de 2022.

Su vida de fe comienza con la recepción de las aguas bautismales en la parroquia de Nuestra Señora de Arbás de Gordaliza del Pino. El crisma de la confirmación lo recibe en esta misma parroquia en 1941.

En años muy difíciles para nuestra España, en 1935, comienza sus estudios primarios en su pueblo natal hasta 1941 en que se traslada a nuestro Seminario menor de Puente la Reina para cursar los estudios secundarios.

Del Seminario menor pasa a Vera de Bidasoa (Navarra) donde realizará el postulantado en el verano de 1946, para entrar en el noviciado el 28 de septiembre. Culminará este tiempo con su primera profesión el 29 de septiembre de 1947, haciéndola perpetua en Garaballa (Cuenca) en esa misma fecha, pero de 1949.

Tras cursar los estudios eclesiásticos, de filosofía en Puente la Reina entre 1947 y 1949, y de teología en Salamanca entre 1950 y 1954, recibirá los distintos ministerios de manos del dominico obispo de Salamanca mons. Francisco Barbado Viejo: las órdenes menores el 4 de abril de 1953, el diaconado el 1 de julio de 1953 y el presbiterado el 17 de abril de 1954.

Y llega nuestro habitual recuerdo agradecido por los distintos servicios prestados en nuestra Provincia.

Su primer destino fue Puente la Reina donde ejerció como ecónomo y consejero local entre 1954 y 1956.

Será consejero provincial entre 1959 y 1962.

Pasa a Novelda tras ser nombrado superior y ecónomo de la comunidad en 1963 hasta 1965.

Ese año es elegido Superior provincial, oficio en el que se desempeñará hasta 1971.

A su conclusión, deja Madrid II para trasladarse a Puente la Reina, nuevamente como superior local hasta 1977, en que es destinado como superior y ecónomo a Valencia solo por un año.

En efecto, el 7 de julio de 1978 es elegido Ecónomo provincial, oficio en el que servirá hasta el año 2002.

Compaginará este servicio con otros, como ser miembro de la Comisión general de Economía entre 1972 y 1985 o presidente del Consejo de Gráficas Dehon entre 1972 y 1985.

Entrado ya en período de jubilación se dedicó a la secretaría de bienhechores entre 2002 y 2016.

Querido P. Nazario, tras muchos años de hacer balances y rendiciones de cuentas, ha llegado el momento de hacerlas con el Señor de la vid. El examen último es el del amor y a Él se lo tuviste, fuiste afable con quien nos visitaba y, como todos, no nos queda más que entregarnos confiados al Señor Jesús que repara cuanto de errado hicimos y purifica nuestros ojos con la claridad del amor.

Que el Señor Jesús te conduzca a la casa que contribuiste a administrar en los años de tu larga vida y Él acabe la obra buena que comenzó en ti.

Que Nuestra Señora del Camino te sonría y te conduzca al encuentro pascual con tu Señor. Descansa en la paz del Corazón de Jesús.

P. Juan José Arnaiz Ecker, scj, Superior provincial